Todos con una conexión a Internet en su casa, disfrutan de un nuevo modo de relación social, el conocer amigos, publicar ensayos o notas como esta, comerciar e intercambiar productos, estudiar, trabajar, buscar a personas, buscar objetos, información, votar, publicar e intercambiar conocimientos.
La lista es cada vez más y más larga, cada día se agregan nuevas aplicaciones, entonces no es extraño pensar que vamos hacia un nuevo tipo de democracia. O en realidad un viejo tipo de democracia, es decir, como esa que inventaron los griegos, pero en una versión ilimitada, sin restricciones, más horizontal.
Entonces podemos aventurar que los gobiernos que surjan de estas nuevas formas deben adaptarse a la participación popular cada vez mas numerosa, sin restricciones. La adaptación debe estar concebida a partir de que las personas que participen son las que tienen el poder, el verdadero poder, y que las formas de gobierno que surjan serán simplemente una administracion al servicio de la gente, para y por la gente.
Las preguntas que surgen, entonces, serán:
¿Son los Gobiernos actuales capaces de virar hacia este nuevo tipo de participación?
¿Serán capaces de darse cuenta que son sólo una herramienta ordenadora?
¿Podrán compartir el poder?
Maria Julia Schaffer
RRPPP
